Los pines de los procesadores suelen ser muy delicados, si se llega a estropear o incrustar de mala manera en su sitio puede sufrir graves daños. Si estos no entran en contacto de la manera conveniente no funcionará adecuadamente y provocará daños en tu hardware. A continuación, te mostraremos algunas soluciones para estos daños.

1. Endereza los pines con una tarjeta de crédito
Pon tu CPU en una superficie dura y plana en la cual puedas hacer fuerza y poner el aparato con los pines hacia arriba. Garantiza que la electricidad estática tenga una buena salida con un metal que esté conectado a la tierra.

Busca una buena tarjeta para hacer el procedimiento, esta debe ser dura y no muy gruesa. Por esto decimos que una buena solución es casi cualquier tarjeta de crédito. Ante esto, ten presente que por ningún motivo debes hacer mucha fuerza hacia los pines ya que se pueden dañar.

Pasa la tarjeta entre los pines en todas las direcciones para poner rectos los pines. Inserta de nuevo el CPU en la Board, revisa que entre con normalidad y que no haya ningún pin doblado.

2. Acomoda los pines con un portaminas
Busca un buen portaminas que use minas de unos 0,5 o 07 milímetros. Este método es bueno si tienes unos pocos pines dañados.

Quítale todas las minas al portaminas, para que la punta esté totalmente libre.

Haz que el pin quede dentro de la punta del portaminas, luego de eso acomódalo con mucho cuidado en su posición original.

3. Toma como palanca una aguja de coser
Esto lo debes hacer cuando las puntas están demasiado dobladas como para pasar una tarjeta de crédito a través de las filas de pines. Este proceso es tedioso, pero te servirá para los casos en que estén muy doblados y no haya otra forma de levantarlos.

Escoge una aguja que sea de buen tamaño para que pase entre los pines, también te pueden servir los palillos o pequeñas pinzas.

Desliza la aguja por debajo del pin que tengas doblado, siempre con el cuidado de no arañar la superficie de tu CPU.

Levanta la punta de la aguja para ir apalancando los pines hasta su posición original. Si el pin ya está lo suficientemente derecho intenta incrustarlo en el zócalo de tu CPU, o si no puedes recurrir a los métodos anteriores para acabar de ajustar los pines de la manera adecuada.



Algunos consejos:
Revisa con detalle dónde están los pines torcidos para que tu trabajo sea eficaz y te brinde buenos resultados. Trabaja en un lugar con buena luz para encontrar todos los pines doblados. Si crees que ya terminaste, pero sigue sin encajar en el zócalo, es probable que sean los pines del centro los que necesiten enderezarse.

Precaución:
1- Si instalas incorrectamente tu CPU perderás la garantía en caso de que la tenga.
2- No olvides aplicar la pasta térmica luego de incrustarlo.
3- Ten mucha precaución en este procedimiento, pues si se desprende alguno de los pines, no hay manera de reemplazarlo.
4- No es necesario que queden completamente perfectos, solo lo suficientemente rectos como para ingresar al zócalo. Si los mueves hacia un lado y luego el otro, es probable que se rompan, así que se muy paciente en el trabajo.
5- Ten acceso a una lupa que te permita revisar con detenimiento tu progreso y el trabajo que estás realizando.