Para ayudarte con la elección de tu futuro sistema operativo o distribución Linux, aquí tienes los criterios de elección más importantes:
Propósito: el primer criterio al que atender para elegir una distribución Linux adecuada es el propósito para el que se va a usar.
General: la mayoría de usuarios la quieren para un uso genérico, es decir, para todo, tanto para reproducir multimedia, como para software de ofimática, navegación, videojuegos, etc. Para estos propósitos son la mayoría de las distribuciones, como Ubuntu, Debian, Linux Mint, Fedora, openSUSE, etc.
Live/Pruebas: si solo deseas ejecutar la distro para probarla o para hacer ciertas tareas de mantenimiento de un equipo sin instalar o alterar las particiones, lo mejor es una que tenga modo LiveDVD o Live USB para ejecutarla desde la memoria principal. Tienes muchas como Ubuntu, Knoppix, Slack, Finnix, RescaTux, Clonecilla Live, etc. Éstas dos últimas para realizar diagnóstico y reparación.
Específico: otra posibilidad es que necesites una distro para un uso muy específico y particular, como para desarrollo, para ingeniería o arquitectura, para entornos educativos, pentesting o auditorías de seguridad, gaming y retro gaming, etc. Y para ello también tienes algunas especializadas como Kali Linux, Ubuntu Studio, SteamOS, Lakka, Batocera Linux, DebianEdu, EskoleLinux, Sugar, KanOS, etc. Más información aquí.
Flexible: algunas distros permiten un mayor grado de personalización, como Gentoo, Slackware, Arch Linux, etc. Pero si quieres ir más allá y hacer tu propia distro desde cero, sin basarte en ninguna, puedes usar LFS.
Tipo de usuario: hay varios tipos de usuarios en cuanto a los conocimientos, como los principiantes o los recién llegados al mundo GNU/Linux, o los avanzados, así como aquellos avanzados que buscan lo mismo que los principiantes, una distro simple, funcional, con buena compatibilidad, y que les permita hacer su trabajo sin complicaciones y de una forma productiva.
Principiante: para los principiantes hay distros más sencillas como Ubuntu, Linux Mint, Zorin OS, Manjaro, MX Linux, Pop!_OS, elementaryOS, Solus OS, etc.
Avanzado: otras distros para estos usuarios son Gentoo, Slackware, Arch Linux, etc.
Entorno: otra de las cosas que deberías pensar antes de elegir una distribución es el tipo de entorno para el que irá dirigida, ya que hay distros que se adaptan mejor que otras a esos entornos.
Escritorio: para usar en un PC de casa o en una oficina, centro educativo, etc, podrás usar distros como openSUSE, Ubuntu, Linux Mint, y un largo etc.
Móvil: existen distros específicas para dispositivos móviles, como Tizen, LuneOS, Ubuntu Touch, postmarketOS, Mobian, etc.
Servidor/HPC: en este caso deberían ser seguras, robustas y muy estables, además de tener buenas herramientas de administración. Algunos ejemplos populares son RHEL, SLES, Ubuntu Server, Debian, Liberty Linux, AlmaLinux, Rocky Linux, Oracle Linux, etc.
Nube/Virtualización: para estos otros casos tienes Debian, Ubuntu Server, RHEL, SLES, Cloud Linux, RancherOS, Clear Linux, etc.
Embebidos: dispositivos como las smart TVs, routers, algunos electrodomésticos, vehículos, maquinas industriales, robots, IoT, etc., también necesitan de sistemas operativos como WebOS, Tizen, Android Auto, Raspbian OS, Ubuntu Core, Meego, OpenWRT, uClinux, etc.
Soporte: la inmensa mayoría de los usuarios, especialmente los domésticos, no suelen necesitar soporte. Cuando surgen problemas o acuden a alguien que tenga conocimientos sobre el tema o simplemente buscan en foros o en la red una solución. En cambio, en las empresas, y en otros sectores, sí que es necesario disponer de un soporte para solventar problemas.
Comunidad: estas distros suelen ser totalmente gratuitas, pero carecen de un soporte por parte del desarrollador.
De grado empresarial: algunas son gratuitas, pero hay que pagar por el soporte. Será la propia compañía la que se encargue de proveer de soporte. Por ejemplo, Red Hat, SUSE, Oracle, Canonical, etc.
Estabilidad: según para lo que la vayas a usar, si necesitas disponer de las últimas novedades a costa de menor estabilidad, o si prefieres algo más estable y robusto aunque no tengas lo último, podrías elegir entre:
Develop/Debug: puedes encontrar versiones en desarrollo del kernel y de algunas distros, así como de otros muchos paquetes de software. Pueden ser positivas para probar las últimas características, depurar, o para ayudar al desarrollo reportando errores. En cambio, hay que evitar estas versiones si lo que se busca es estabilidad.
Estable:
Standard Release: salen versión cada cierto tiempo, generalmente puede ser cada 6 meses o cada año, y se van actualizando hasta la llegada de la siguiente gran versión. Aportan estabilidad y es el método que han adoptado muchas distros conocidas.
LTS (Long Time Support): tanto el kernel como las propias distros tienen en algunos casos versiones LTS, es decir, que van a tener mantenedores dedicados a seguir lanzando actualizaciones y parches de seguridad en un largo plazo (5, 10 años…), incluso si ya hay otras versiones más nuevas disponibles.
Rolling Release: en vez de lanzarse versiones puntuales que sobrescriben a la anterior, este modelo lanza actualizaciones constantes. Esta otra opción te permite disponer de lo último, pero no es tan estable como el anterior.
Arquitectura:
IA-32/AMD64: la primera también se conoce como x86-32 y la segunda como EM64T por parte de Intel, o x86-64 de forma más genérica. Engloba a los procesadores de Intel y AMD, entre otros, de las últimas generaciones para los que el kernel Linux tiene un soporte excepcional, dado que es la más extendida.
ARM32/ARM64: el segundo también se conoce como AArch64. Estas arquitecturas han sido adoptadas por los dispositivos móviles, routers, Smart TVs, SBCs, e incluso servidores y supercomputadoras, por su alto rendimiento y eficiencia. Linux también cuenta con un excelente soporte para ellas.
RISC-V: esta ISA ha nacido recientemente, y es de código abierto. Poco a poco va cobrando importancia, y convirtiéndose en una amenaza para x86 y ARM. El kernel Linux ha sido el primero en tener soporte para ella.
POWER: esta otra arquitectura es muy popular en el mundo del HPC, en los chips de IBM. También encontrarás kernels Linux para esta arquitectura.
Otros: por supuesto, existen otras muchas arquitecturas para las que el kernel Linux también es compatible (PPC, SPARC, AVR32, MIPS, SuperH, DLX, z/Architecture…), aunque estas no son tan frecuentes en el mundo del PC o del HPC.
Soporte de hardware: algunas de las que mejor soporte de hardware tienen son Ubuntu, Fedora, y otras de las más populares, incluido las derivadas de estas. Además, las hay que incluyen controladores libres y propietarios, otras simplemente los primeros, por lo que su rendimiento y funcionalidad podría ser algo más limitado. Por otro lado, siempre surge el problema de si una distro es demasiado pesada o si ha abandonado el soporte de 32-bit como para funcionar en máquinas más antiguas o de recursos limitados.
Controladores:
Libres: muchos de los controladores de código abierto funcionan bastante bien, aunque en casi todos los casos se ven superados por los de código cerrado. Las distros que solo incluyen estos son las 100% libres que cité más adelante.
Propietarios: en el caso de los gamers, o para otros usos donde se necesite extraer el máximo del hardware, es preferible elegir los propietarios, más aún cuando se trata de la GPU.
Distros ligeras: hay muchas distribuciones pensadas para soportar equipos antiguos o con recursos limitados. Estas suelen tener los entornos de escritorio ligeros que cito más adelante. Ejemplos son: Puppy Linux, Linux Lite, Lubuntu, Bodhi Linux, Tiny Core Linux, antX, etc.
Soporte de software y software preinstalado: si estás buscando el mejor soporte de software, ya sean programas de cualquier tipo o videojuegos, las mejores opciones son distros populares basadas en DEB y RPM, aunque preferiblemente es mejor el primero. Con la llegada de los paquetes universales está ayudando a los desarrolladores a llegar a más distros, pero aún no se están usando todo lo que se debería. Por otro lado, también es probable que necesites un sistema completo, con casi todo el software necesario preinstalado, o si solo quieres un sistema lo más diminuto y simple.
Minimal: existen multitud de distros mínimas o con posibilidad de descargar imágenes ISO con el sistema base y nada más, para que puedas agregar los paquetes que necesitas a tu gusto.
Completa: la opción favorita de la mayoría son las ISOs completas, para que no tengas que molestarte en instalar todo desde cero, sino que ya cuentes con un gran número de paquetes desde el primer instante en que instalas la distro.
Seguridad y privacidad/anonimato: si te preocupa la seguridad, el anonimato o la privacidad, deberías saber que deberías elegir una distro lo más popular posible, y con el mejor soporte, para disponer de los últimos parches de seguridad. En cuanto al anonimato/privacidad, las hay especialmente diseñadas para eso si lo quieres.
Normal: las distros más populares como openSUSE, Linux Mint, Ubuntu, Debian, Arch Linux, Fedora, CentOS, etc., cuentan con un magnífico soporte y actualizaciones de seguridad, aunque no están enfocadas a la seguridad, privacidad/anonimato.
Blindada: existen algunas con trabajos de hardening adicionales o que respetan el anonimato o la privacidad del usuario como principio esencial. Algunos ejemplos ya los conoces, como TAILS, Qubes OS, Whonix, etc.
Sistema de inicio: como sabrás es algo que ha dividido a muchos usuarios y administradores del sistema entre los que prefieren un sistema de inicio más simple y clásico, como SysV init, o uno más moderno y grande como systemd.
Clásico (SysV init): fue usado por la mayoría de las distros, aunque en la actualidad casi todas se han pasado al moderno systemd. Entre sus ventajas están la de ser más simple y ligero, aunque también es antiguo y no fue diseñado en su momento para los sistemas operativos modernos. Algunas que aún siguen usando este sistema son Devuan, Alpine Linux, Void Linux, Slackware, Gentoo, etc.
Moderno (Systemd): es mucho más pesado y abarca más que el clásico, pero es el que han elegido la mayoría de distros por defecto. Se integra mejor en los sistemas modernos, tiene multitud de herramientas de gestión que facilitan mucho el trabajo. En contra quizás tiene esa pérdida de la filosofía Unix dada su complejidad, y también el uso de registros (logs) binarios en vez de texto plano, aunque para esto hay todo tipo de opiniones…
Otros: existen otras alternativas menos populares como runit, GNU Sherped, Upstart, OpenRC, busy-box init, etc.
Aspectos estéticos y entorno de escritorio: aunque se puede instalar el entorno de escritorio que se quiera en cualquier distribución, es cierto que muchas de ellas ya vienen con un entorno de escritorio predeterminado. Elegir el adecuado no solo es cuestión de estética, también de usabilidad, capacidad de modificación, funcionalidad e incluso rendimiento.
GNOME: basado en bibliotecas GTK, es el entorno reinante, el que más se ha extendido entre las distribuciones más importantes. Está enfocado a ser fácil y simple de usar, con una enorme comunidad, aunque es pesado en cuanto a consumo de recursos. Además, también ha dado lugar a derivados (Pantheon, Unity Shell…).
KDE Plasma: basado en bibliotecas Qt, es el otro gran proyecto en cuanto a escritorios, y se caracteriza por lo personalizable que es y, últimamente, por su rendimiento, ya que ha «adelgazado» mucho, considerándose ligero (usa pocos recursos de hardware), así como su apariencia, robustez, y posibilidad de usar widgets. En su contra quizás se puede destacar que no es tan sencillo como GNOME. Al igual que GNOME, también han aparecido derivados como TDE, etc.
MATE: es una de las bifurcaciones de GNOME que más popular se ha hecho. Es eficiente en cuanto al uso de recursos, bonito, moderno, simple, similar al escritorio Windows, y sin cambios demasiado evidentes en los últimos años.
Cinnamon: también se basa en GNOME, con un aspecto sencillo y atractivo, además de destacar por ser flexible, extensible y rápido. Quizás en el lado negativo tiene la necesidad de usar privilegios para ciertas tareas.
LXDE: basado en GTK y es un entorno ligero, pensado para consumir muy pocos recursos. Es rápido, funcional y con un aspecto clásico. En contra tiene algunas limitaciones en comparación con los grandes entornos, y que no tiene su propio gestor de ventanas.
LXQt: basado en Qt, y emergiendo de LXDE, es también un entorno ligero, modular y funcional. Similar al anterior, aunque también puede ser algo simple a nivel visual.
Xfce: basado en GTK, el otro de los mejores entornos ligeros junto con los dos anteriores. Destaca por su elegancia, simplicidad, estabilidad, modularidad y capacidad de configuración. Como le ocurre a sus alternativas, tal vez pueda tener limitaciones para algunos usuarios que buscan algo más moderno.
Otros: existen otros, aunque son minoría, Budgie, Deepin, Enlightenment, CDE, Sugar, etc.
Gestor de paquetes: tanto por cuestiones relacionadas con la administración, si estás acostumbrado a usar unos u otros gestores de paquetes, como por motivos de compatibilidad, según en el tipo de binario que esté empaquetado el software que usarás frecuentemente, también deberías plantearte elegir la distro adecuada.
DEB-based: son la inmensa mayoría gracias a Debian, Ubuntu y sus numerosos derivados que se han hecho muy populares, por lo que si quieres la mayor disponibilidad de binarios, ésta es la opción más acertada.
RPM-based: existen también muchísimos paquetes de este tipo, aunque no tantos, ya que distros como openSUSE, Fedora, etc., y no han llegado a tantos millones de usuarios como las anteriores.
Otros: también existen otros gestores de paquetes minoritarios como pacman de Arch Linux, portage de Gentoo, pkg en Slackware, etc. En este caso, no suele haber demasiado software fuera de los repos oficiales de las distros. Afortunadamente, los paquetes universales como AppImage, Snap, o FlatPak, han hecho que se puedan empaquetar para todas las distros GNU/Linux.
Principios/ética: se refiere a si simplemente quieres un sistema operativo funcional, o si buscas algo en base a unos criterios éticos o principios.
Normal: la mayoría de distros incluyen software libre y propietario en sus repos, así como módulos propietarios en su kernel. Así dispondrás del firmware y controladores propietarios si lo necesitas, o de otros elementos como codecs propietarios para multimedia, cifrado, etc.
100% libre: son distros que han excluido todos esos códigos cerrados de sus repos, e incluso que usan el kernel GNU Linux Libre, sin blobs binarios. Algunos ejemplos son Guix, Pure OS, Trisquel GNU/Linux, Protean OS, etc.
Certificadas: en algunos casos particulares, quizás es importante que las distribuciones GNU/Linux respeten ciertos estándares o que tengan ciertos certificados por cuestiones de compatibilidad o para que puedan ser usadas en ciertas instituciones.
Sin certificado: el resto de distros. Aunque la inmensa mayoría sí que son POSIX-compliant, y algunas otras también se amoldan a LSB, FHS, etc. Por ejemplo, existen algunas rarezas como Void Linux, NixOS, GoboLinux, etc., que se salen de algunos estándares.
Con certificado: algunas tienen certificaciones como las de The Open Group, como por ejemplo:
Inspur K-UX fue una distro basada en Red Hat Enterprise Linux que consiguió estar registrada como UNIX
, aunque actualmente está abandonada.
También vas a encontrar otras con ciertas certificaciones, como SUSE Linux Enterprise Server y su IBM Tivoli Directory Serve con certificado LDAP Certified V2.
El sistema operativo Huawei EulerOS, basado en CentOS, es también un UNIX 03 Standard registrado.
Diagramas para elegir S.O.
Este diagrama me llegó a través de una amiga que me lo pasó, y decidí buscar algunos más y compartirlo para que sirva de ayuda a una buena cantidad de tipos de usuarios y necesidades diferentes. Y el resultado de la recopilación de flowcharts es este:
¿Vienes de otro S.O. diferente?
Recuerda que si has aterrizado recientemente en el mundo GNU/Linux y provienes de otros sistemas operativos diferentes, también puedes ver estas guías que confeccioné para ayudarte en al elección de la distro inicial y durante tu adaptación:
Guía para los usuarios que vienen desde Microsoft Windows
Guía para los usuarios que vienen desde el mundo macOS
En caso de venir del mundo Google Android, y no haber tenido un PC anteriormente, o desde Chromebook, te aconsejo optar por ChromeOS, Android x86 (PrimeOS, Harmony OS, BlissOS,etc.), CloudReady, o ChromiumOS.
Para los que provengan de sistemas como FreeBSD u otros *BSD, Solaris, etc., no deberían tener problemas de adaptación, aunque tal vez se sientan más cómodos en distros como Gentoo o Slackware. O tal vez dar un paso intermedio entre BSD y GNU/Linux con distros como Debian GNU/kFreeBSD, etc.
En estos enlaces encontrarás qué distribuciones se ajustan mejor a ti., con entornos más amigables y parecidos a lo que usabas antes…